Fundación Amén Cominicaciones2023-10-172023-10-172023-09-29http://72.167.44.240:4000/handle/123456789/133https://drive.google.com/file/d/1nb1pHpRTmCA9fMPwzs_j4R5BQ9Ckzn-H/view?usp=drive_linkTRANSLITERACIÓN REFLEXIÓN PADRE CARLOS YEPES Celebra hoy la Iglesia la fiesta de los santos Arcángeles, Miguel, Gabriel y Rafael. Sabemos que en la tradición bíblica los nombres están directamente asociados a una misión. Miguel, ¡quien como Dios!, el gran protector de la Iglesia, Gabriel ¡fortaleza de Dios!, el anunciador a María de aquel que en la debilidad de su carne en un pesebre, Jesús, será la gran fuerza para el mundo por su entrega en la cruz. Rafael, que significa ¡medicina de Dios!, es aquel que cura a Tobías cuando le toca los ojos con sus manos. Reconocemos en los arcángeles, los grandes mensajeros de Dios enviados al mundo para dar noticias de esperanza, de paz, de bienestar y salvación para los hombres. Hoy, con sencillez y confianza, encomendémonos a los santos arcángeles y pidamos su intercesión ante el Padre Dios, para que guíen y acompañen nuestra vida. Y en esta línea está el evangelio de hoy de san Juan en el capítulo primero, cuando Jesús hablando acerca de Natanael, lanza una de las más hermosas expresiones que se puede decir de hombre alguno. En efecto, Jesús hablando de Natanael, dice: “He aquí un israelita, un judío de verdad, en quien no hay engaño”. Qué bueno, que de cualquiera de nosotros el Hijo de Dios pudiera proclamar esta expresión, ¡he aquí un hombre, una mujer de verdad, porque tiene corazón sincero; no hay malicia, no hay doblez, no hay engaño en su alma! Pero luego hay una segunda expresión que nos llama la atención en el evangelio de este día, y es que Felipe, ante la expresión de Natanael de cómo puede salir algo bueno de Nazaret, Jesús le responde: “Antes de que Felipe te llamara cuando estabas debajo de la higuera, te vi”. Natanael se quebranta, algo extraordinario tuvo que ocurrir, acontecer en su vida debajo del arbusto de la higuera, para que él de esta forma impactante responda a Jesús: “Rabí, tú eres el Hijo de Dios, el rey de Israel”, es un secreto que sólo conoceremos en la vida eterna y que ahora está reservado sólo a Jesús y a Natanael. Hoy reconocemos que el Señor, desnuda nuestro corazón, revela aquellos momentos grandes de nuestra existencia y nos muestra como desde siempre nos ha acompañado, nos ha cuidado, nos ha protegido. Finalmente, en una tercera expresión del evangelio de hoy, Jesús dirá a Natanael: “Te impresionas por decirte que te vi debajo de la higuera, pues verás cosas mayores”. Y afirmará Jesús: “Verán el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del Hombre”. Hoy está promesa se extiende a todos los hombres y mujeres de limpio corazón, si en verdad cuidamos la higiene de nuestra alma, si en verdad buscamos vivir, pensar y obrar a la manera de Jesús, con transparencia de corazón, veremos las maravillas de Dios, las bendiciones divinas sobre nuestra vida y la vida de los demás. Hoy, Señor, te pedimos que a la manera de Natanael, tengamos un corazón limpio para alcanzar la bienaventuranza que reza: “Bendito, dichoso el limpio de corazón, porque ése verá a Dios”. Que el Señor te bendiga en este día, y los arcángeles te cuiden, en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.REFERENCIA BÍBLICA DEL EVANGELIO Juan 1, 47-51 Lectura del día de hoy Apocalipsis 12,7-12a: Miguel y sus ángeles declararon la guerra al dragón. Se trabó una batalla en el cielo; Miguel y sus ángeles declararon guerra al dragón. Lucharon el dragón y sus ángeles, pero no vencieron, y no quedó lugar para ellos en el cielo. Y al gran dragón, a la serpiente primordial que se llama diablo y Satanás, y extravía la tierra entera, lo precipitaron a la tierra y a sus ángeles con él. Se oyó una gran voz en el cielo, Ya llega la victoria, el poder y el reino de nuestro Dios, y el mando de su Mesías. Porque han derribado al acusador de nuestros hermanos, al que los acusaba noche y día ante nuestro Dios: Ellos lo vencieron con la sangre del Cordero y con la palabra del testimonio que dieron, pues no amaron tanto su vida como para rechazar la muerte. Por eso, alegraos, cielos, y los que en ellos habitáis. Palabra de Dios, te alabamos Señor. Salmo del día de hoy Salmo (138) Palabra de Dios, te alabamos Señor. Te doy gracias, Señor, de todo corazón; delante de los ángeles tañeré para ti, me postraré hacia tu santuario. Palabra de Dios, te alabamos Señor. Daré gracias a tu nombre: por tu misericordia y tu lealtad, porque tu promesa supera a tu fama; cuando te invoqué, me escuchaste, acreciste el valor en mi alma. Palabra de Dios, te alabamos Señor. Que te den gracias, Señor, los reyes de la tierra, al escuchar el oráculo de tu boca; canten los caminos del Señor, porque la gloria del Señor es grande. Palabra de Dios, te alabamos Señor. Evangelio del día de hoy Del santo Evangelio según san Juan 1, 47-51: En aquel tiempo, vio Jesús que se acercaba Natanael y dijo de él: -Ahí tenéis a un israelita de verdad, en quien no hay engaño. Natanael le contesta: – ¿De dónde me conoces? Jesús le responde: -Antes de que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi. Natanael respondió: -Rabí, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel. Jesús le contestó: – ¿Por haberte dicho que te vi debajo de la higuera, crees? Has de ver cosas mayores. Y le añadió: -Yo os aseguro: veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre. Palabra del Señor, gloria a ti Señor Jesús.CorazónJesús acompañaJesús cuidaLimpieza de corazónMaravillas de DiosProtección de DiosBibliaEvangelio¡Árcangeles Miguel, Gabriel, Rafael!Natanael