¡Amén a sus enemigos!
| dc.contributor.author | Fundación Amén Comunicaciones | |
| dc.date.accessioned | 2024-04-19T18:14:57Z | |
| dc.date.available | 2024-04-19T18:14:57Z | |
| dc.date.issued | 2023-06-20 | |
| dc.description | TRANSLITERACIÓN REFLEXIÓN PADRE CARLOS YEPES . El evangelio de san Mateo en el capítulo 5, versículos 43 a 48, y en el contexto del llamado Sermón de la Montaña, contenido en los capítulos 5, 6, y 7 de san Mateo, nos presenta uno de los mensajes más exigentes, más incomprensibles y también más contundentes que Jesús pide a todos sus discípulos. En efecto, retomando la ley mosaica, reconoce que, en un primer momento por nuestra naturaleza humana, nosotros amamos a quien nos hace el bien y aborrecemos, rechazamos u odiamos a quienes consideramos nuestros enemigos. En esta primera afirmación reconocemos, lo que es la condición humana, que es retributiva, vengativa, si se quiere. El hombre, la mujer en general, aunque habrá honrosas excepciones, siempre paga el bien con más bien, y el mal con más mal. Jesús conoce este aforismo de la ley mosaica, han oído que se dijo: “Amarás a tu prójimo y aborrecerás a tu enemigo”. Pero Él quiere dar un salto cualitativo, no quedarse en la mera naturaleza humana que siempre reclama desquite o retribución y nos invita por la filiación divina en un segundo momento, por el Espíritu Santo que recibimos en el Bautismo, a mirar la vida, a mirar las personas y a mirar las relaciones humanas con los ojos de Dios. Y esto nos lleva a una exigencia que nos parece tremendamente difícil para nuestra simple y pobre lógica humana, Jesús dirá: “Yo les invito, amen a sus enemigos, recen por los que los persiguen, para que solo así sean hijos de su Padre Celestial, que hace salir su sol cada día, sobre hombres malos y buenos y manda caer la lluvia sobre hombres justos e injustos”. Qué difícil, cuando de manera tajante se nos plantea, amar al que nos hace el daño, orar por aquella persona que nos persigue; podríamos decir en lo humano parece imposible, pero solo cuando tenemos conciencia de que somos hijos de Dios, de que estamos llenos de la fuerza del Espíritu Divino, seremos capaces de semejante exabrupto desde lo humano, pero claro mandato desde el evangelio, ¡amar y orar por la persona o las personas que nos parecen dañadas, torcidas, corruptas y han sido maliciosas, malintencionadas, ofensivas con nosotros!. Hoy, que el Señor nos dé su gracia, su luz y la fuerza espiritual que nos viene precisamente por el Espíritu del Resucitado, para obedecer, para guardar semejante mandato. En mi vida como sacerdote, conozco realmente muy pocas personas que amen de corazón a quienes les han ofendido y que oren cada día por aquellos que les persiguen. Pero no hay otra opción, Jesús no da otra puerta de salida, sólo así seremos hijos del Padre de los cielos, sólo así podremos imitar su Espíritu lleno de bondad, compasión y misericordia. Si muchos cristianos dicen, dejaré de vivir el evangelio, renunciaré a mi fe porque no voy a amar a nadie que me ha hecho daño, pues hasta desde lo humano se le puede comprender; pero recuerda que, si Jesús lo manda, si Jesús lo pide, es porque eres capaz, somos capaces de perdonar a los que nos han lastimado, somos capaces de orar y amar a aquellos que nos han perseguido. Concluirá Jesús, con una tercera idea y de manera también tajante y sirviéndose de la cotidianidad afirmará, que si nosotros amamos a la familia, los amigos, nuestros bienhechores, en definitiva a los que nos aman ¿cuál es el mérito?, ¿cuál es el don?, ¿cuál es la bondad verdadera que realizamos? Y preguntará Jesús: “¿Acaso no hacen esto también los paganos, los gentiles, los publicanos?”. No, Jesús nos invita a que seamos perfectos como el Padre de los cielos es perfecto. Hoy, y en la línea de lo que afirmábamos en el evangelio del día de ayer, recuerda, que construimos enemigos mentales y emocionales, esto es en nuestra mente y en nuestro corazón, cuando resistimos a una persona en nuestros pensamientos, en nuestras emociones y “destruimos” ese enemigo, cuando aprendemos el camino de comprender esa persona, aceptarla en su historia, asumirla en sus dificultades, su complejidad, su dureza y, en definitiva, amarla. Solo se destruye un enemigo, amándolo, construimos todos los enemigos posibles odiando a otras personas. El odio nos daña a nosotros, el odio nos enferma a nosotros, el odio nos envenena y mata a nosotros; el amor por el contrario como expresión máxima en el perdón, nos sana a todos, el perdón nos hace grandes, el perdón nos hace hijos del Padre de los cielos. Que el Señor, te bendiga en abundancia en este día, en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén. | |
| dc.description.abstract | REFERENCIA BÍBLICA DEL EVANGELIO Mateo 5, 43-48 Lectura del día de hoy Lectura del segundo libro a los Corintios 8,1-9: Cristo se hizo pobre por vosotros. Hermanos: Os informo del favor que Dios ha hecho a las iglesias de Macedonia: En las pruebas y desgracias creció su alegría; y su pobreza extrema se desbordó en un derroche de generosidad. Con todas sus fuerzas y aún por encima de sus fuerzas -os lo aseguro-, con toda espontaneidad e insistencia me pidieron como un favor que aceptara su aportación en la colecta a favor de los hermanos. Y dieron más de lo que yo esperaba: se dieron a sí mismos; primero al Señor y luego, como Dios quería, también a mí. En vista de eso, como fue Tito quien empezó la cosa, le he pedido que dé el último toque entre vosotros a esta obra de caridad. Ya que sobresalís en todo: en la fe, en la palabra, en el conocimiento, en el empeño y en el cariño que nos tenéis, distinguíos también ahora por vuestra generosidad. No es que os lo mande, os hablo del empeño de otros para comprobar si también vuestra caridad es genuina. Bien sabéis lo generoso que ha sido nuestro Señor Jesucristo: siendo rico, por vosotros se hizo pobre, para que vosotros, con su pobreza, os hagáis ricos. Salmo del día de hoy Salmo 146/ 145,2.5-6.7.8-9a: Alaba, alma mía, al Señor. Alabaré al Señor mientras viva, tañeré para mi Dios mientras exista. Dichoso a quien auxilia el Dios de Jacob, el que espera en el Señor su Dios, que hizo el cielo y la tierra, el mar y cuanto hay en él; que mantiene su fidelidad perpetuamente. Que hace justicia a los oprimidos, que da pan a los hambrientos; el Señor liberta a los cautivos. El Señor abre los ojos al ciego, el Señor endereza a los que ya se doblan; el Señor ama a los justos, el Señor guarda a los peregrinos. Evangelio del día de hoy Evangelio según san Mateo 5, 43-48: En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: -Habéis oído que se dijo: Amarás a tu prójimo y aborrecerás a tu enemigo. Yo, en cambio, os digo: Amad a vuestros enemigos, haced el bien a los que os aborrecen y rezad por los que os persiguen y calumnian. Así seréis hijos de vuestro Padre que está en el cielo, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e injustos. Porque, si amáis a los que os aman, ¿qué premio tendréis? ¿No hacen lo mismo también los publicanos? Y si saludáis sólo a vuestro hermano, ¿qué hacéis de extraordinario? ¿No hacen lo mismo también los paganos? Por tanto, sed perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto. Palabra del Señor, Gloria a ti Señor Jesús. | |
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| dc.identifier.uri | https://drive.google.com/file/d/146QIOG3Iw6V6qQsE8m-i1GOnjKAziOee/view?usp=drive_link | |
| dc.subject | Amar sobre todo al enemigo | |
| dc.subject | Amor a todos | |
| dc.subject | Enemigos | |
| dc.subject | Fuerza del amor | |
| dc.subject | Hacer el bien | |
| dc.subject | Mirar con los ojos de Dios | |
| dc.subject | Perdonar | |
| dc.subject | Quien te hace el bien | |
| dc.subject | Sanar | |
| dc.subject | Biblia | |
| dc.subject | Evangelio | |
| dc.title | ¡Amén a sus enemigos! | |
| dc.title.alternative | Amen a sus enemigos y recen por sus perseguidores |
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